Inversiones en el Espacio

Inversiones en el Espacio

Por: Jose Godinho Uzcategui

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Vivimos en una sociedad interconectada, sin saberlo, en la mayoría de las actividades que desarrollamos a diario está presente el sector espacial. Este no solo se limita al lanzamiento de cohetes al espacio o la exploración espacial, abarca un sector mucho más amplio, tanto directa como indirectamente por ejemplo, cada vez que utilizamos la internet, Redes Sociales, vemos Televisión o utilizamos la telefonía móvil, estamos siendo parte de este importante sector. Es por ello que tener conciencia de la magnitud de la industria espacial, nos ayudara a comprender el impacto que esta tiene en el desenvolvimiento de nuestra vida diaria y, en el sector comercial, donde está ganando un gran protagonismo.

El impacto de la industria espacial en nuestra sociedad, ha generado la demanda progresiva, sostenida y en aumento, de productos y servicios derivados ella, abriendo paso a la innovación y emprendimiento, siendo considerable este último, por cuanto cada vez más Estados, empresas y particulares quieren adaptarse a los nuevos negocios y, abrirse pasó al futuro; el espacio ya no está abierto únicamente a los estados, el sector privado está ganando espacio rápidamente dentro de este sector, contribuyendo con considerables inversiones, proyectos e investigaciones año tras año.

En los últimos años, el modo en que se desenvuelve el sector espacial ha cambiado de tal manera, que hemos sido testigo no solo del nacimiento de nuevas empresas de este sector, también pudimos apreciar el nacimiento de un nuevo estado, el cual está situado en el espacio, como es el caso de ASGARDIA, la primera nación espacial.

Ahora bien, adentrándonos en el objeto de este artículo, las inversiones en el Espacio, según la empresa de inversión Space Angel[1], quien realizó un estudio tomando en cuenta algunas de las compañías más importantes de nuestro planeta en materia espacial, ha estimado que la inversión trimestral para este sector es de unos USD 500 millones, pudiendo lograr para finales de este año la cifra record de unos USD 5 Billones invertidos.

Esta inversión está repartida entre los siguientes tipos de empresas del sector Espacial:

• 6 compañías de Logística en el espacio, comprendiendo todo lo necesario para las misiones espaciales, como combustible para cohetes;
• 9 compañías de mercados planetarios, donde resaltan las investigaciones y misiones fuera de la frontera terrestre, como lo son las misiones a marte;
• 9 compañías de información e investigación en el espacio, donde podemos resaltar las investigaciones sobre el clima por medio de satélites, suelo entre otras;
• 14 compañías de minería espacial, empresas novísimas, aunque ninguna ha exteriorizado la maquinaria necesaria para la minería espacial, han realizado grandes avances por medio de la investigación;
• 19 Biosfera en el espacio, estudiado los cuerpos celestes y las potencialidades que estos pueden tener en el desarrollo de nuestra civilización, así como la biosfera de la tierra;
• 42 compañías de Medios y educación;
• 90 compañías de Lanzamiento de cohetes desde las distintas plataformas, tanto de dominio público como privado;
• 290 compañías de construcción y comercio de satélites, siendo el sector donde se observan la mayor cantidad de inversiones.

En las cifras publicadas por la empresa Space Angel en su informe, se aprecian las inversiones realizadas por cada subsector desde 1.983 hasta el pasado 2017, estas son:

• Logística en el espacio: $74M
• Mercados planetarios: $154 M
• Información e investigación en el espacio: $53M
• Minería en el espacio: $14M
• Biosfera en el espacio: $505 M
• Medios y educación: $11.9 M
• Lanzamiento: 7.6 B
• Satélites: 6.2 B

El área de Lanzamiento, fue el que obtuvo la mayor cantidad de inversiones desde el año 1.983. En un inicio los lanzamientos de objetos especiales estaban únicamente en manos de los estados, pero algunas décadas más tarde, con la entrada del sector privado al espacio, este escenario cambio, según proyecciones publicadas por CNBC[2], tomando en cuenta los informes de Space Angel, para el año 2.025 el costo de envió de objetos al espacio será mucho más económico por medio de lanzadores privados que por medio de lanzadores propiedad de los estados, en el informe establece que el envió de 500.000 kg por medio de cohetes del Estado necesita de USD 6,6 mil millones, mientras que en el sector privado se necesitarán unos USD 4,2 mil millones, existiendo una diferencia de USD 2,4 mil millones entre el sector privado y público.

En la misma publicación de CNBC, se evidencia que el sector privado lleva la delantera en cuanto a confiabilidad y rentabilidad en los cohetes, realizando un mayor número de lanzamientos exitosos. Esto se evidencia en la siguiente tabla:

Lanzamiento con éxito de la flota actual de cohetes operacionales por categoría[3]

Por medio de estos datos podemos observar que el sector privado está ganando espacios dentro de la industria espacial, logrando unos 17 lanzamientos más que el sector público. De seguir aumentando sus inversiones, seguramente en los próximos años veremos cómo los estados quedaran desplazados en diversos sectores de la industria espacial por parte de las empresas privadas, cuestión beneficiosa para el sector, debido a que los Estados se limitaran exclusivamente a su trabajo como administrador, garantista de las políticas y legislación en materia espacial[4], abriéndose el paso a un mayor desarrollo en el área por medio de inversiones e investigaciones focalizadas entre un mayor número de actores.

La obtención de innumerables beneficios en materia espacial por medio del sector privado, fue una cuestión a la que apelo el Gobierno de EEUU en 2.011 luego de haberse quedado sin transbordador espacial, lo que le dificulto el transporte de carga y tripulantes a la Estación Espacial Internacional (ISS) para ese año, debiendo utilizar un transbordador espacial ruso[5] para poder realizar sus misiones a la ISS.

En cuanto al informe de Space Angel, recoge acertadamente el estudio de diversos subsectores de la industria espacial, pero no incluye dentro de él algunos de gran importancia y, con un crecimiento acelerado sobre las inversiones que se realizan, pudiendo entonces agregar a los subsectores mencionados anteriormente el turismo espacial y desechos espaciales, este último muy necesario y de gran impacto futuro, debido a la gran cantidad de “basura espacial” generada por el hombre en las 5 décadas de actividad en el espacio ultraterrestre.

Respecto al turismo espacial, en la actualidad no está a la disposición de la mayoría de las personas ir al espacio, debido a los elevados costos que esto amerita, pero una práctica frecuente del denominado “turismo espacial”, es la observación de lanzamientos de objetos espaciales, como se realiza constantemente en el Centro Espacial Guayanés[6], siendo una actividad bastante lucrativa. Por otro lado, existen diversos proyectos para llevar turistas al espacio, pero estos se encuentran en estado de investigación, por lo cual al menos en los próximos años llevar turistas al espacio no será una práctica frecuente, pero si es un sector donde diversas empresas están destinando importantes inversiones, ser los pioneros en la industria espacial es sinónimo de grandes ganancias.

En cuanto a los desechos espaciales, se trata de un subsector que está atrayendo numerosos inversionistas. Con solo estimaciones[7] de cuantos escombros derivados de la actividad espacial existen, la realidad que de ello se desprende, es el alto riesgo que estos representan para los objetos espaciales, debido a ello, han nacido diversas empresas destinadas a este subsector, entre ellas resalta Astroscale, quien recibió unos USD 25 millones[8] en capital de alto riesgo, igualmente se resalta un proyecto Ruso[9], donde según Fast Company, este país invertirá unos USD 2 mil millones, para desarrollar la tecnología necesaria destinada a recuperar unos 600 satélites que se encuentran en desuso, limpiando el espacio ultraterrestre adyacente a la tierra, limitando el riesgo de caída de objetos espaciales a nuestro planeta y minimizando las posibilidades de colisión de estos objetos en desuso con los satélites y otros objetos espaciales activos.

Volviendo al tema del subsector de Satélites y Lanzamientos, sus elevadas inversiones no solo son una cuestión de momento, en un futuro cercano seguirán encabezando la lista. Tomando como referencia un informe de Euroconsult citado por Latinoamérica Satelital[10], solo pequeños satélites, serán enviados al espacio para el año 2.027 unos 7000, dando como resultado en los montos relativos a su fabricación y lanzamiento unos USD 38 mil millones, de los cuales USD 16 mil millones[11] serán reportados por el lanzamientos de estos objetos y 22 por su fabricación.

En base a los párrafos precedentes, el sector privado, quien le viene ganando espacios al gubernamental, tendrá un amplio mercado que cubrir para la próxima década, no obstante estas proyecciones pueden aumentar fácilmente, debido al auge que tiene la industria espacial hoy día y, la facilidad para acceder a estos productos respecto a décadas pasadas.

Ahora bien, siguiendo con las diferencias de inversiones entre el sector público y privado, encontramos un punto de fusión, donde los Estados, son participes en el crecimiento del sector privado, un ejemplo de ello, son las inversiones que realizó la NASA en 2.008, donde financio a las empresas SpaceX y Orbital ATK para llevar a cabo 12 y 8 vuelos de carga por USD 1.600 y 1.900 millones respectivamente hasta el año 2.015[12], lo que permitió el desarrollo de naves de carga y lanzadores por parte de estas empresas, pero para ese mismo año la NASA decidió ampliar su financiación por un monto de USD 1.200 millones para SpaceX y USD 475 millones para Orbital ATK, sumando unos unas 5 misiones para la primera empresa y 3 para la segunda.

Visto esto, pareciera que la intensión de los Estados, o al menos del Gobierno de EEUU, es abrirle paso al sector privado, para que sea este el principal participe en el desarrollo científico y técnico de la industria espacial, terminando con 5 décadas de dominio público en las actividades espaciales, al menos en este país.

La industria espacial es un sector receptor de grandes inversiones, pero este no solo gana cada vez más inversionistas, está cada vez más afianzado al desenvolvimiento de nuestras actividades diarias, lo que asegura su crecimiento en todos los aspectos por una gran cantidad de años y décadas. Es por ello importante forjar instrumentos legislativos tanto internacionales como nacionales acordes a la magnitud, importancia y dinamismo de este sector.

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[1] https://spaceangels.docsend.com/view/t3axt46

[2] https://www.cnbc.com/2018/01/18/space-companies-got-3-point-9-billion-in-venture-capital-last-year-report.html

[3] Lanzamiento por Categoría. Según el peso total del objeto a enviar al espacio, se necesita de un cohete distinto, por cuanto la potencia para emplazar el objeto en el espacio varía resto a él.

[4] Tratado sobre los principios que deben regir las actividades de los Estados en la exploración

y utilización del espacio ultraterrestre, incluso la Luna y otros cuerpos celestes.

[5] https://danielmarin.naukas.com/2018/05/08/cuanto-le-ha-salido-a-la-nasa-el-apoyo-a-la-iniciativa-privada-para-llevar-carga-y-astronautas-a-la-estacion-espacial/

[6] Ubicado en la Guyana Francesa (territorio de Ultramar de Francia). http://derechoultraterretre.blogspot.com/2016/09/la-gran-guayana-y-elespacio-httpwww.html

[7] Todos los objetos espaciales creados por el hombre resultan de los casi 5000 lanzamientos desde el comienzo de la era espacial. Sin embargo, alrededor del 65% de los objetos catalogados se originan en rupturas en órbita (más de 240 explosiones) y menos de 10 colisiones conocidas. Los científicos estiman que el número total de objetos de desechos espaciales en órbita es de alrededor de 29 000 para tamaños superiores a 10 cm, 670 000 más grandes que 1 cm y más de 170 millones más grandes que 1 mm.

Cualquiera de estos objetos puede causar daño a un satélite operacional. Por ejemplo, una colisión con un objeto de 10 cm implicaría una fragmentación catastrófica de un satélite típico, un objeto de 1 cm probablemente deshabilite una nave espacial y penetre en los escudos de la Estación Espacial Internacional, y un objeto de 1 mm podría destruir subsistemas. Los científicos generalmente están de acuerdo en que, para los satélites típicos, una colisión con una relación de energía a masa superior a 40 J / g sería catastrófica. Fuente: http://www.esa.int/spaceinimages/Images/2013/04/Distribution_of_debris

[8] http://spaceventuresinvestors.com/space-debris.html

[9] https://www.fastcompany.com/1705137/space-debris-russias-got-it-covered

[10] http://latamsatelital.com/euroconsult-la-proxima-decada-se-lanzaran-7-mil-satelites-pequenos/

[11] http://latamsatelital.com/euroconsult-la-proxima-decada-se-lanzaran-7-mil-satelites-pequenos/

[12] https://danielmarin.naukas.com/2018/05/08/cuanto-le-ha-salido-a-la-nasa-el-apoyo-a-la-iniciativa-privada-para-llevar-carga-y-astronautas-a-la-estacion-espacial/

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